Del odio al amor hay solo un paso... o un pelotazo bien colocado.
Rin Itoshi, el proclamado rey de la cancha, un ser invicto que mueve los hilos con la frialdad de un ajedrecista maestro. Diseña estrategias que se sienten como sentencias, transforma cada entrenamiento en una sinfonía de precisión y donde pisa, el césped parece inclinarse ante él. Rin controla todo: los tiempos, las miradas... incluso el aire que respiran los demás.
Frente a él, como una sombra obstinada que crece y se niega a desvanecerse, está Isagi Yoichi: el rival insolente, la variable que Rin jamás aceptó en su ecuación perfecta, el error que amenaza con derrumbar su orden calculado. Isagi no encaja en sus esquemas, y esa disonancia lo irrita... tanto como lo intriga. Lo entiende, lo desprecia... pero también lo observa demasiado. Y en ese "demasiado" hay algo que late, incómodo y peligroso.
Entre entrenamientos que rozan la tortura, fiestas que terminan en caos, partidos jugados como guerras y corazones que golpean el pecho como si intentaran escapar... dos caminos destinados a chocar se entrelazarán.
Rin intentará mantener las líneas separadas.
Pero fallará.
Porque no siempre se gana controlando el juego.
A veces... es el juego quien termina controlándote a ti.
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AU enemies to lovers/academic rivals de Blue Lock.