A la deriva
Lucía Rangelin siempre tuvo un don... y una condena.
En un mundo donde los más talentosos llevan habilidades imposibles -arquitectos que pueden oler un edificio a cientos de metros, músicos que escuchan el pasado en cada nota-, su poder era la manipulación. Una mente afilada, capaz de torcer voluntades y verdades con la misma facilidad que otros doblan papel.
Pero ahora está encerrada en el último piso de un hospital psiquiátrico para mentes "peligrosas", acusada de un crimen que jura no haber cometido... o al menos, no recordar. Entre paredes acolchadas, tensiones prohibidas y el constante juego mental con su enigmático doctor, una verdad late bajo la superficie: alguien la quiere silenciada.
Cuando el encierro se rompe, Lucía queda a la deriva, a bordo de un barco que navega más allá de mares conocidos. Cada puerto es un mundo distinto, una realidad torcida donde las reglas cambian y la cordura es una moneda frágil. Ciudades suspendidas en el aire, desiertos de cristal, países que viven del intercambio de recuerdos... y en cada uno, una pista más sobre quién la traicionó.
Vivian creía que su vida estaba destinada a la tristeza y el miedo... hasta que los Vatroslav la encontraron. Cuatro hermanos, poderosos, letales y hermosamente imposibles, entran en su mundo, dispuesto a protegerla, poseerla y cambiar su destino para siempre.
Entre secretos de mafia, pasiones prohibidas y un amor que desafía todas las reglas, Vivian descubrirá que el corazón no entiende de límites... y que a veces, el peligro más mortal es también el más irresistible.