En el vasto cielo, donde las nubes se despliegan como un lienzo infinito de blanco y gris, habitaba Jay, un maestro elemental del rayo, cuya existencia se había fusionado con el poder electrizante que gobernaba y ahora vivía en perfecta armonía con las tormentas que rugían en el cielo, cada destello de luz que iluminaba las nubes era una extensión de su ser, cada trueno que retumbaba era su voz, Jay era uno con el rayo, y en ese estado de unión, había encontrado una paz que trascendía la comprensión. En un mundo aparte, Kai residía en el corazón de un volcán imponente, ubicado en una isla azotada por tormentas eléctricas constantes, como maestro elemental del fuego, su esencia se había entrelazado con las llamas que danzaban en las profundidades de la tierra, el calor abrasador y la lava fundida eran su dominio, su pasión y su vida, y en ese abrazo ardiente, Kai había descubierto una fuerza y una convicción que lo definían.
Inevitablemente, Jay y Kai se encontraron. Fue como si el universo hubiera decidido que había llegado el momento de que estos dos poderosos elementos se conocieran. El rayo y el fuego, dos fuerzas primordiales de la naturaleza, se cruzaron en un baile de energía y pasión. Y en ese instante, algo inesperado sucedió; experimentaron una sensación que ninguno de los dos podía explicar, una emoción que había estado perdida en las profundidades de sus seres desde que se fusionaron con sus respectivos poderes. Era un sentimiento que ninguno conocía, un concepto que les era ajeno, pero que resonaba profundamente en sus almas: amor. Dos dioses de elementos distintos, uno del cielo eléctrico y el otro del fuego terrestre, se habían enamorado.
En el momento final antes de su destrucción, Wanda Maximoff -la Bruja Escarlata- es arrastrada hacia un vacío más allá del tiempo y la forma. Perdida en el abismo de su culpa, una luz misteriosa la toca... y la devuelve. No a su mundo, sino a otro. Uno donde la magia es distinta. Donde la redención podría tomar forma: el mundo de Harry Potter.
Cuando una figura luminosa -una cierva- le muestra los recuerdos de un niño abandonado y maltratado por sus parientes, Wanda comprende su nuevo propósito: proteger al hijo de Lily Potter. Aunque no sabe por qué fue elegida, acepta el trato. A cambio de una oportunidad de redención, cuidará del pequeño Harry.
Pero Wanda no es una bruja común. Y este mundo no está preparado para ella. Desde el primer momento en Privet Drive, los Dursley sentirán que algo ha cambiado.
Con poder, determinación y una compasión creciente, Wanda enfrentará un nuevo destino. Porque esta vez... nadie tocará al niño sin enfrentarse a ella.
Después de todo, ¿quién mejor para proteger al Niño Que Vivió... que la mismísima Bruja Escarlata?
Nota del autor/a: Esta historia está libremente inspirada en la premisa inicial de Strange Potter, una obra que admiro profundamente y que fue una chispa creativa para desarrollar este proyecto. Aunque la trama, el desarrollo de los personajes y los eventos son completamente originales y distintos, considero justo reconocer esa inspiración inicial.
Asimismo, se trata de un fanfic sin fines de lucro que fusiona elementos de los universos de Marvel y Harry Potter, cuyos derechos pertenecen a sus respectivos creadores y propietarios (Marvel/Disney y J.K. Rowling). Esta obra está hecha con respeto y con la intención de rendir homenaje a estos mundos que tantas personas hemos disfrutado.