Wang Mei Xiu.
¿Cómo podríamos definir a Mei?, una sola palabra, perfecta. Era considerada una reina en los pasillos de su universidad, no solo por su belleza física, sino también por su personalidad intimidante.
Su rostro era perfecto, con rasgos delicados y una piel suave como la porcelana. Sus manos largas y elegantes, y siempre arregladas con un hermoso esmalte color rojo. También era conocida por su gran sentido de la moda, su ropa impecable y siempre luciendo ropa de diseñador a donde quiera que fuera, junto a accesorios y tocados que lucian en su largo y sedoso cabello.
Pero detrás de su apariencia perfecta, Wang Mei Xiu tenía una personalidad fría y distante antes las personas no cercanas a ella. Sus ojos gelidos y fríos como el hielo que parecian capaces de poder congelar a cualquiera que se atreviera a desafiarla o pasar por encima de ella. Era conocida por ser antipática y despectiva con quienes la rodaban, aquello era uno de las razones por lo cual muchos estudiantes le temían y evitaban.
Gracias a eso, ganó el apodo entre el alumnado como "La reina de hielo". Alguién que no dudaría en aplastarte como un cucaracha si te atraviesas en su camino.
La gente murmuraba mucho sobre su vida y su familia, y aunque muchas de las historias eran probablemente una mentira más o historias inventadas, había una cosa que era cierta: Wang Mei xiu era estupidamente rica. Había sido criada en un mundo lleno de lujos, privilegios y, sobre todo, exigencia.
Su familia, era conocida por su riqueza y influencia en el mundo empresarial, y también en el mundo hotelero, al tener una de las mejores empresas de construción de toda china, junto a diversos hoteles puesto en todas las partes del mundo, su familia había construido un imperio.
Había sido moldeada al gusto y beneficio de su familia, perfeccionista y exigente. Sí, Mei estaba dispuesta a llenar las espectativas de todos sobre ella y seguir con el imperio de su familia en pie.