Dicen que la vida cambia en un segundo.
La mía cambió en el tiempo exacto que le tomó a mi padre decir: "No es lo que parece", con el labial de su secretaria todavía fresco en el cuello de su camisa de marca.
Hasta entonces, yo era Valeria de la Vega : alumna de arte en una escuela de élite, hija de una diseñadora de interiores con más seguidores que autoestima, y de un empresario demasiado ocupado para recordar mis cumpleaños. Vivíamos en un piso de cristal y mármol, con vistas a la ciudad y cero vistas a la realidad.
Después del escándalo, mamá lloró en silencio por tres días. Al cuarto, vendió el apartamento, se cortó el pelo, y me dijo: "Nos vamos."
¿A dónde?, pregunté.
A un paso del cielo, respondió.
Pensé que era una metáfora. No lo era.
Ahora estoy aquí, en un pueblo perdido entre montañas y campos, donde las vacas superan a las personas en número, no hay señal de movil y el silencio es tan espeso que parece gritar. Mamá dice que es un nuevo comienzo. Yo lo llamo exilio.
No tengo amigos. No tengo mi vida de antes. Solo tengo una cámara antigua que pertenecía a mi abuelo, y con ella intento capturar algo, lo que sea, que me devuelva un poco de control.
Fue mientras buscaba la luz perfecta para una foto cuando vi una bicicleta.
Y con ella, él.
No sabía que ese chico de granja, con tierra bajo las uñas y olor a caballo, iba a desmontar todo lo que yo pensaba que sabía.
De mí.
De la gente.
Del amor.
Esta es la historia de cómo me rompí en mil pedazos... y de cómo un pueblo olvidado, un chico imposible y una cámara antigua me enseñaron a encontrar belleza incluso en lo roto.
Avery juró que lo último que quería en su vida era llamar la atención. Su plan era simple: concentrarse en las competencias de snowboard y sobrevivir a la temporada de invierno en Los Nevados de Chillán junto a su equipo.
Pero todo cambió la noche de la bajada de las antorchas, cuando el destino decidió cruzarla con Ethan Cole: capitán del equipo rival, arrogante, insoportable... y peligrosamente encantador.
Una rivalidad en la pista.
Un trato inesperado fuera de ella.
Un fake relationship que nadie debe descubrir... y que podría convertirse en algo mucho más real de lo que Avery jamás imaginó.
Entre descensos vertiginosos, miradas que queman más que el frío y canciones que parecen hablarles directamente, Avery descubrirá que el verdadero riesgo no está en la nieve... sino en dejarse deslizar hacia alguien que juró odiar.