Estaba cansada, cansada de lo mismo, cansada de ser utilizada una y otra vez solo porque necesitaba dinero, porque no era la niña que nació en cuna de oro, no era la hija de papa y mama, esa que jugaba con muñecas y sus amiguitas, no, yo era la que conseguía el dinero para poder mantener a mi familia, y sobre todo, a mi padre que luchaba día a día por su vida, maldito cáncer que me lo arranco de las manos el día de navidad....
Y para colmo, un día normal a las 2 de la mañana, saliendo del bar donde trabajaba, vi a lo lejos llamas, humo y escuche el sonido de algunas sirenas ¿bomberos? Si, eso eran, tratando de salvar mi casa, y a mi madre, que no pudo contra las llamas y el humo, mi hermana solo estaba parada afuera gritando, llorando, no lo podía creer, ahora solo estábamos ella y yo... Sin nada.
3 años han pasado desde entonces, me mude a LA, conseguí un mejor puesto, en el Prostibulo VIP de San Diego, rente un pequeño apartamento, donde dejaba a mi hermana con mi mejor amiga cuidándola mientras yo me ganaba la vida como: prostituta.