El agua corria por las regillas y mi sangre la acompañaba. Sentí que era feliz, ya todo había acabado. Dejaría de sufrir y sería feliz. Estaba muriendo. Sentí felicidad, todo se había esfumado. Dolor, problemas, cortes, hambre, sangre, lágrimas. Ya no quedaba nada, solo mi cuerpo rodeado de sangre y una carta de otra historia suicida _____________________ Todos los derechos reservados