SANCTA HAERESIS

Nadie sabe por qué ni cómo ocurrió, pero... Dios se corrompió. El Creador abandonó a los hijos que hizo a su imagen y semejanza. Ya no es un ser benevolente. Ahora encarna la herejía, la demencia y el caos. Él mismo volcó las copas de su ira y forzó a las trompetas del apocalipsis a llorar un lamento funesto: "el Réquiem de la Cuerda Herida". Entonces, proclamó el juicio final para su más grande error: "el Pecado de la Existencia". Como renombró a la raza humana.

Sin embargo, una anomalía vaga por el universo. Un fallo. Una grieta en el tejido de la realidad que está drenando lentamente el poder del Todopoderoso. ¿Un "Deus Ex Machina"? Tal vez. ¡Pero es suficiente para que surja una esperanza! La gran pregunta persiste: ¿quiénes podrían enfrentarse al Padre Creador, si incluso los dioses han sido obligados a ejercer violencia? La respuesta, en cuestión, es sencilla: siete humanos. No un pelotón, mucho menos un ejército.

¡¡Hablamos de los gladiadores entre los gladiadores!!, ¡¡la cúspide de la evolución, incluso superando a los mejores de su especie!! Presumiblemente, ¡¡los únicos capaces de mirar al cielo sin corromperse!! Pero no estarán solos en el coliseo. ¡No, por supuesto que no!, ¡¡ya que los humanos más importantes que alguna vez pisaron la tierra erradicarán todo obstáculo que se les interponga!! Y así, en un mundo al borde del olvido, comenzó la última guerra por el destino de la humanidad.