Su Protegida

Siempre había estado sola.
Él era mi guardaespaldas, yo su protegida.
Aunque nos conocimos antes de ser conscientes de eso. En un club de striptease.
Entonces descubrí que nuestro mundo no estaba hecho para el amor; solo para el dinero y la pasión.
Los matrimonios concertados, los bailes seductores y las mentiras empañadas de sangre.
No existían las promesas. Solo leyes.
O sigues las normas, o te eliminan del juego, ese fue el trato.
Pero no supimos resistirnos y caímos en la tentación. Un jaque mate.
Al fin y al cabo, es muy fácil ser la presa del lobo. Y muy difícil acabar con la reina, ¿no?