La cura para nuestras heridas (Paul Lohate)
51 parts Complete Ambos arrastraban cicatrices invisibles, heridas que no sangraban pero dolían igual. Él, con el peso de una casa donde las palabras siempre eran gritos o silencios incómodos. Ella, con una familia que la hacía sentirse como una pieza que nunca encajaba. Caminaban por la vida con el corazón a medio cerrar, protegiéndose de todo y de todos.
El día que sus miradas se cruzaron, algo extraño ocurrió. No fue un flechazo fulminante, sino una sensación inquietante, como si se reconocieran de algún lugar que ninguno recordaba. Era como mirarse en un espejo que no deformaba, sino que mostraba la verdad. Desde entonces, cada encuentro les robaba un poco más de espacio a sus miedos y se lo entregaba a una ternura silenciosa. El amor no llegó de golpe, sino como una brisa suave que, día tras día, fue curando lo que creían imposible de sanar.