Un asesino en serie ha emergido de las sombras, sembrando el pánico con una serie de muertes brutales. Pero hay algo diferente: este depredador nocturno solo tiene un objetivo, un código estricto. Sus víctimas son hombres y mujeres que, a ojos de la justicia y la moral, han escapado a su merecido: gente corrupta, criminales impunes, la escoria de la sociedad.
La opinión pública está dividida. Para algunos, es un monstruo; para otros, un justiciero anónimo. Un agente curtido en la caza de mentes oscuras, cuya carrera se define por atrapar a quienes creen estar por encima de la ley, es el encargado de detenerlo. Para él, la línea entre el bien y el mal es inquebrantable, y un asesino sigue siendo un asesino, sin importar a quién mate.
En una carrera contra el tiempo que pondrá a prueba sus límites éticos y morales, el agente debe navegar un laberinto de secretos y apoyo popular. ¿Podrá capturar a un asesino cuya misión parece ser limpiar las calles?