Para todos, Charles Leclerc era el príncipe de Mónaco,
arrogante, perfecto, intocable.
Su vida era lujo, fama y poder. Hasta el día que desapareció.
Carlos Sainz lo había observado durante meses, planeando cada detalle.
No quería su dinero, ni su estatus, ni su mundo perfecto.
Solo quería a Charles.
Quería verlo suplicar, llorar. Romperse.
Ahora, encerrado en el sótano de una elegante casa a las orillas de la ciudad, lejos de cualquier mirada curiosa, Charles descubrirá que no hay muros lo suficientemente altos para contener la obsesión de Carlos.
"Este es un nuevo año escolar en el internado Haverbrook; un internado exclusivo para las élites y personas de alto rango, perdido entre los bosques de Alemania. Su arquitectura gótica se alza con imponentes murallas, torres que parecen tocar el cielo, y fachadas decoradas con relieves tan detallados que parecen susurrar historias olvidadas. El portón de hierro forjado cruje con cada ráfaga de viento, como si advirtiera a aquellos que se atrevan a entrar. Desde el momento en que lo vi, un escalofrío recorrió mi espina dorsal y no se detuvo. ¿Qué misterios acechan este lugar? ¿Crees saber lo que realmente pasa en este lugar y a sus estudiantes y profesores?"