Amor entre Líneas

Siempre había sabido que algunos secretos pesan más que otros, y el dilema de confiárselo a alguien o nunca hablarlo pesa aún más. Y el mío no era un secreto cualquiera... o al menos uno fácil de asimilar para mí: cada vez que la veía sonreír o reír junto a mí, mi corazón explotaba y al mismo tiempo se asustaba, sabía que si alguien lo descubría o si alguien notaba la manera en la que la miraba, algo malo pasaría o simplemente todo cambiaría. El miedo y la confusión era algo que reinaba dentro de mi cada que estaba junto a ella. La manera en la que mi mente y corazón se juntaban a debatir que era lo que realmente estaba sintiendo. Querer aceptar o no la realidad... simplemente era una adolescente llena de tantas preguntas que no tenían respuesta.
Si pudiera volver a esos días, a esas decisiones un poco ilógicas y llenas de sentimientos, tal vez haría algo diferente. O tal vez no. Soy consciente de que cada decisión, cada secreto, cada error y cada sentimiento, me trajo hasta aquí. ¿Me gusta el resultado? Bueno... no me quejo, soy feliz, hay días en los que cuesta un poco más que otros, pero creo que finalmente amo quién soy, a pesar de seguir con secretos. Simplemente me pregunto... ¿cómo estará ella, donde sea que se encuentre? No me malinterpreten: ya no la amo de esa manera, simplemente es una espina nostálgica cargada de sentimientos y recuerdos de un amor expresado entre líneas. A veces me pregunto si hubiera hecho las cosas diferentes, o si hubiera estado más para ella, si las cosas simplemente hubieran sido distintas... tal vez todavía estaríamos juntas en algún sentido.