El martillo y el foso es una arqueología estética del presente.
Un tratado sobre cómo el siglo XXI cambió la moral por la imagen, la política por la performance, el deseo por el reflejo.
Aquí no se juzga: se disecciona.
Cada capítulo analiza una estética dominante -la progre, la amorosa, la corporal, la feminista, la kirchnerista- no como ideología, sino como narrativa visual de poder.
Este libro no busca salvar al sujeto contemporáneo, sino mostrar cómo se fabrica:
cómo el amor se volvió algoritmo,
cómo la rebeldía se volvió branding,
cómo la compasión se volvió marketing,
y cómo el dolor -de clase, de género o de alma- se transformó en contenido.
En un tiempo donde todos se muestran lúcidos, El martillo y el foso propone otra cosa:
pensar como quien golpea una máscara,
mirar el brillo hasta que duela,
y escuchar lo que el sistema dice cuando calla.
No hay héroes ni víctimas aquí. Solo cuerpos, imágenes y una lucidez que se resiste a dormir.
Porque detrás de cada discurso moral, late un deseo anestesiado.
Y detrás de cada sonrisa, el eco del fentanilo digital.
sinopsis:
como estoy aquí? q me paso estoy asustada cada vez mas no se donde estoy no recuerdo mi nombre, ni quien soy, ni de donde vengo cada vez, es peor estoy encerrada en un ascensor? me siento perdida.
de pronto pude acordarme mi nombre.................