𝙁𝙖𝙡𝙡 𝙗𝙖𝙘𝙠 𝙞𝙣𝙩𝙤 𝙥𝙡𝙖𝙘𝙚 - 𝐂𝐡𝐚𝐫𝐥𝐨𝐬

Dicen que hay personas que llegan a tu vida como tormentas, y otras que lo hacen como amaneceres.
Charles y Carlos nunca supieron cuál de las dos eran el uno para el otro.
Desde el primer cruce de miradas, hubo algo que escapaba a la lógica. Algo que iba más allá de la pista, los autos y el rugido de los motores.
Era como si el universo, en su caos perfecto, se hubiera detenido solo para verlos coincidir.
Y sin embargo, a veces el destino no se muestra con suavidad.
A veces se disfraza de orgullo. De silencios prolongados. De miradas que no se sostienen por miedo a revelar demasiado.
Ellos aprendieron a reconocerse incluso cuándo el mundo parecía empeñado en separarlos. En cada roce fugaz. En cada palabra no dicha. En cada esquina del camino que los mantenía cerca, aunque doliera.
Porque hay vínculos que no necesitan explicaciones.
Porque hay historias que comienzan mucho antes de que los protagonistas se den cuenta.
Y esta... esta es la suya