Silencio del alba ; cantar de sangre

Hubo una vez una niña marcada por la pérdida.
Su hogar fue consumido por el silencio y su infancia se apagó en una noche de invierno, entre la escarcha y las sombras de criaturas que devoran la luz. Desde entonces, aprendió a vivir con las manos heridas y el corazón endurecido por el frío y la soledad.

Sin familia, sin descanso, creció enfrentando el hambre, la culpa y el miedo. Cada amanecer fue una batalla, cada herida una prueba. Pero en sus ojos, aun cansados, arde una llama que ni la muerte pudo apagar. Una fuerza nacida del dolor, que la guiará por el mismo camino que alguna vez destruyó su hogar.

Cuando los demonios regresen, Ryumei no huirá.
Empuñará una espada.
Porque los que han visto la oscuridad de cerca, son los únicos capaces de luchar contra ella.

En un mundo donde la noche se alimenta de sangre,
nace la fuerza de una cazadora.