Instinto Primario

Tras una misión fallida contra el Dr. Eggman, Sonic y Shadow quedan atrapados en un santuario abandonado durante una tormenta. Una niebla química liberada por el villano acelera de forma abrupta y violenta el ciclo de celo de Sonic, quien es un Omega, desatando en él una fiebre y un malestar insoportables. Shadow, como Alfa, se ve profundamente afectado por los instintos primarios que despierta el aroma desesperado de Sonic.

Abrumado por el dolor y la confusión, Sonic, en un estado de vulnerabilidad extrema, le suplica a Shadow que lo ayude. Esta petición rompe el último vestigio de control de Shadow, llevándolos a ambos a ceder a sus naturelezas más básicas. La noche se convierte en una intensa y cruda entrega donde los instintos Alfa y Omega toman el control, culminando en un acto de posesión y consuelo que termina por sellar un vínculo profundo e irreversible entre ellos a través de una mordida de apareamiento.