La vida de Lloyd, el malogrado Ninja Verde, es una espiral de combate, trauma y aislamiento. A sus dieciséis años, carga con el peso de ser el hijo del señor de la guerra, Lord Garmadon, cuya mera existencia ha sido la justificación de una guerra sin fin. Pero ahora, las reglas del conflicto se han roto de la peor manera.
El arsenal de Garmadon ya no es un juego; la introducción del Arma Máxima, capaz de desatar misiles de destrucción masiva sobre la Ciudad de Ninjago, ha escalado la guerra a un nivel de terrorismo y carnicería gráfica. Mientras los civiles mueren y las estructuras se desmoronan en ruinas, el equipo ninja adolescente lucha no solo contra mechas y soldados, sino contra el estrés postraumático y la culpa que carcome sus almas.
En este infierno personal y bélico, el equipo busca refugio en sus propias dinámicas:
Kai y Cole se aferran a una relación gay clandestina que les ofrece una frágil intimidad, enfrentando el estigma de la Homofobia en un mundo que solo acepta héroes de un solo molde.
Jay se somete a la fuerte voluntad de Nya, mientras lucha por controlar la ansiedad que lo acerca al consumo de sustancias.
Lloyd busca en su novia, Cassandra, un ancla emocional para el abrumador peso de su linaje y el profundo trauma parental que lo atormenta, recurriendo a veces a un control opresivo.
Con la ciudad al borde del colapso, el Maestro Wu debe guiar a sus pupilos a través de dilemas morales imposibles. La línea entre el heroísmo y la autodestrucción nunca fue tan delgada. Padre e hijo se enfrentarán no por el control de la ciudad, sino por el dolor que han infligido, en una batalla donde las bajas son reales y la única victoria posible es la supervivencia de su propia psique.
¿Qué sucede cuando Cupido se cansa de lo fácil y decide jugar con fuego?
Dos mundos opuestos, dos mujeres que conocen su poder, su valor... y no están dispuestas a cederlo.
Una doctora impecable, con manos que salvan vidas. Una mafiosa indomable, con sangre en las suyas.
Ambas desafiantes y peligrosas. Ambas tan intensas que, cuando sus caminos se cruzan, no se sabe si nacerá una historia de amor... o una guerra sin tregua.