Sombras en la sangre

En la ciudad de Gotham, la rutina se impone como una niebla perpetua. La gente sale a trabajar, ocurren asaltos ocasionales... lo habitual en una metrópolis gris y herida como esta. Los Wayne, una familia de renombre, son admirados por su imperio empresarial y por la aparente generosidad del señor Bruce Wayne. Pero lo que nadie sospecha es que todo ese emporio no es más que una fachada: un velo cuidadosamente tejido para ocultar el verdadero trabajo que se lleva a cabo cuando el resto del mundo duerme.

Los Wayne controlan una vasta extensión de Gotham, pero hay un rincón de la ciudad que nunca han logrado conquistar. Un lugar olvidado por la luz, un territorio al que muchos se refieren como "abandonado por Dios", dominado por los Arlequines: una banda de mafiosos crueles, que esparcen el caos allí donde pisan, dejando tras de sí un rastro de dolor y destrucción.

La tensión entre ambos bandos se fue gestando como una tormenta silenciosa. Hasta que un día, la lucha por el poder estalló en una brutal guerrilla, un enfrentamiento sin tregua que desencadenó una tragedia sin precedentes. Así comenzó una guerra que, aún hoy, parece no tener fin...