Nunca fui muy especial o muy invisible. Soy de las personas promedio. Familia promedio, casa promedio, escuela promedio y vida promedio. Nada muy sobresaliente. Por eso no me sorprende que Nathaniel Smith me buscara para ayudarlo a enamorar ami mejor amiga, porque claro, esa es la única razón coherente por la que un chico de último año, guapo, y bajista de la banda de rock de nuestra escuela me hablaría, el no es un chico promedio. Y en una vida promedio, ningún chico especial se enamora de una chica promedio