
La idea nació una noche de octubre, entre luces estroboscópicas y guitarras que temblaban en el aire. Imagine Dragons tocaba Bad Liar, y en medio del concierto -con la voz de Dan Reynolds (mi marido, pero no lo sabe) quebrándose sobre el estribillo- le dije a mi prima: "Esta canción... Draco se la cantaría a Hermione." Así empezó todo. Un Dramione entre la guerra y la reconstrucción, donde la redención no es una palabra, sino una herida que late. Donde él aprende a no mentirse, y ella a no huir. Porque a veces el amor no llega como salvación, sino como verdad.All Rights Reserved