𝙽𝚘 𝚖𝚎 𝚜𝚞𝚎𝚕𝚝𝚎𝚜.

​Un día normal, donde el sol deslumbraba como siempre, con el ruido de algunos autos y niños jugando. Un pequeño pelinegro que se posaba en la madera de la puerta de su amigo. Tenía un balón en las manos.

​-¿No quieres jugar conmigo Kenma? -le preguntó el pequeño Kuroo con una sonrisa.

Su cabello oscuro, ya desafiando la gravedad incluso a esa edad, parecía un nido brillante bajo la luz de la mañana.

​El contrario levantó su mirada. Sus ojos dorados, grandes y serios, parecían contener más mundo del que le correspondía. Lo único que respondió fue:

​-No soy bueno con la gente.-

​Y aún así, Kuroo decidió quedarse.

-Kuroo x Kenma
-Personajes de Haikyuu.
-Escenas subidas de tono.