Mi último Suspiro por Ti (Re escrita)

En una escuela tan exclusiva que hasta el aire parece tener precio, Thoma intenta sobrevivir entre herederos con bolsillos infinitos y neuronas opcionales. Mientras todos presumen autos, apellidos y destinos de verano, él carga algo menos glamuroso: un pasado lleno de traiciones y golpes emocionales que dejaron marcas invisibles, pero constantes.

La idea de confiar en alguien siempre le ha sabido a peligro... hasta que aparece Charlie, el chico perfecto: amable, cálido, casi imposible de odiar. Alguien que parece reconocer el dolor en Thoma sin que él tenga que explicarlo. En un ambiente donde todo es fachada y las amistades se compran, Charlie se siente distinto. Por primera vez, Thoma baja la guardia. Por primera vez, cree que no está solo. Pero ese "parece" es un arma de doble filo.

Algunas puertas nunca deberían abrirse, y hay secretos que no se esconden, pero el cadáver en el armario no era específicamente una metáfora, y Charlie se encargaría de que fuera así.

Las rosas en el jardín del infierno florecen con una belleza embriagadora, pero entre sus pétalos carmesíes se ocultan espinas que susurran maldiciones. No todo lo que deslumbra es inocente; a veces, hasta el demonio más cruel sabe disfrazarse de fragancia y seducción.