"𝐄𝐥 𝐃𝐫𝐚𝐠ó𝐧 𝐲 𝐋𝐚 𝐇𝐞𝐫𝐞𝐝𝐞𝐫𝐚"

Ambos nacieron del fuego, pero uno lo dominaba... y el otro lo adoraba hasta la locura.

Rhaenyra Targaryen, hija de Viserys, fue criada para gobernar. Orgullosa, impulsiva y apasionada, su fuego era el de la ambición y el deseo de justicia. En ella ardía la convicción de ser la heredera legítima, la llama del deber y del orgullo Targaryen. Amaba el poder, pero también el amor, aunque jamás permitió que ninguno la doblegara

Aerion Targaryen, su Primo, fue una antorcha más peligrosa. Heredó la belleza de los dragones y la locura de los dioses. Creía que la sangre del dragón lo hacía superior a los hombres, un ser destinado a quemar y poseer. Arrogante, cruel y fascinante, Aerion no amaba: devoraba. Su pasión por Rhaenyra era una mezcla de deseo y delirio, un fuego que confundía amor con dominio, devoción con destrucción.

Ella buscaba gobernar el mundo.

Él buscaba poseer el fuego que ella era.

Ambos estaban destinados a Arder juntos y Gobernar la Dinastía Targaryen perfecta Ambición Pasión y Poder de ambos.