Estoy entre la duda de algo inexistente, que a la vez es tan verdadero pero distante, sentimientos dentro de mí que no buscan quedarse, que quieren traspasar fronteras, que se rehúsan a ser efímeros. Estoy entre la duda de algo inexistente, porque deseo que sea real, porque lo quiero con el alma, y la duda inunda mi existencia, la nubla, porque nada es constante, incluso estos sentimientos que de día en día aumentan pero también así se desvanecen. Estoy entre la duda de algo inexistente, porque algo que no conozco me hace más fuerte, porque me hace soñar, porque me hace vivir. Estoy entre la duda de algo inexistente, porque siento amarla, ni mis sentimientos ni yo sabemos que esperar, y sé que ellos anhelan ser correspondidos pero más que ellos lo anhelo yo.
Si alguna vez sentiste que no podías más, si te rompieron el corazón, si confiaste a ciegas y te apuñalaron por la espalda, si creíste que después del dolor no había nada más, este libro es para ti.
En Valentía II encontramos el reflejo de alguien que supo abrazar el dolor y convertirlo en vuelo, como un colibrí renaciendo después de una noche fría de invierno. Kelbin, una vez más, abre las puertas de su alma para mostrarnos que cada caída no es más que un impulso para ser valientes y continuar.