
Imu sabía de la existencia de los dioses, conocía bastante a Nika Dios del Sol después de todo. Por eso, cuando se vio así mismo y a medio mundo; vivo, muerto, del pasado y del futuro, en una extraña sala con una voz diciendo que los trajo ahí por una razón secreta, supo de inmediato que debía ser una deidad o algo de esa clase. Nada en verdad lo preparo para lo que se mostraría, cosas que causarían que su castillo de arena fuera destruido por el viento y las mareas.All Rights Reserved