Hipo, el renombrado jinete de dragones de Berk y el inigualable compañero de su Furia Nocturna, Chimuelo, ha encontrado la vida perfecta: una libertad sin límites explorando islas inexploradas más allá del horizonte. Cumple con sus deberes esenciales, pero utiliza sus viajes como una conveniente evasión de la realidad que lo espera: su destino como futuro jefe de Berk.
Su padre, Estoico el Vasto, presiona constantemente, arrastrando a Hipo a interminables conferencias de jefes y reuniones tribales, intentando prepararlo para las responsabilidades que conlleva velar por las necesidades de su gente.
Sin embargo, el verdadero motivo de la esquiva actitud de Hipo es un secreto que solo él y Chimuelo conocen. A las afueras de la aldea, en una cabaña oculta, vive una joven misteriosa. Ella no es de Berk; Hipo la raptó en uno de sus viajes, no por botín o por fuerza, sino por la inexplicable atracción de su aroma y su belleza sobrenatural. El deber que Hipo realmente teme es aquel que lo obligaría a elegir entre el futuro de su gente y su pasión robada, que lo consume en las sombras.