me enamoré del error

Amélie Moreau, hija del jefe de una poderosa organización mafiosa, vive una vida protegida pero relativamente normal... hasta que un día desaparece sin dejar rastro. La buscan desesperadamente su padre, su tío Adám y sus dos mejores amigas, pero nadie sabe que la joven ha sido secuestrada por Elías, un hombre que finge ser su protector mientras la mantiene aislada y manipulada durante días.
Al principio, Amélie confía en él. Cree que es el único que puede mantenerla a salvo de un supuesto peligro externo. Herida, confundida e incomunicada, se aferra a la única figura estable que tiene cerca.
Pero con el tiempo descubre que no estaba siendo rescatada sino retenida, todo su mundo se desploma: se ha enamorado del enemigo.
En medio de esa verdad devastadora, aparece Luc, un aliado de su familia. Él no solo la encuentra: la ayuda a escapar, la lleva a su casa, la cura, la protege y no busca nada a cambio. Amélie, traumatizada y desconfiada, tarda días en volver a hablar. Pero Luc respeta sus tiempos, sus espacios y su silencio. Él es el contrapunto de Elías: donde uno manipulaba, el otro sostiene; donde uno controlaba, el otro escucha.
Ya más recuperada, Amélie intenta retomar partes de su vida: habla con sus amigas, se pelea por ropa olvidada, llora, ríe, vuelve a caminar sin dolor.
Mientras tanto, Luc le revela la verdad completa: no había enemigos, no había complot, y su padre jamás estuvo involucrado. Todo había sido planeado por Elías para aislarla y tenerla bajo su control.
Días después, finalmente es su padre quien llega a buscarla. No hay caos, ni tiroteos, ni persecuciones: hay explicaciones. Amélie confirma que nunca estuvo en peligro... excepto por el hombre que le hizo creer que la salvaba.
El reencuentro es emocional, profundo y honesto. Ella no vuelve como la misma chica. Vuelve más fuerte y más consciente.
Una historia sobre manipulación, amor peligroso, amistad real y el lento proceso de volver a encontrarse a una misma.