El amor que despertó la tormenta

Dicen que algunas historias empiezan con un encuentro.
La nuestra empezó con una tormenta.
No una de lluvia, sino de esas que nacen en silencio, detrás de los huesos, cuando el mundo se siente a punto de romperse. Antes de que todo cambiara, yo no sabía que un solo latido podía alterar el destino... ni que había miradas capaces de trastocar el cielo.
Éramos dos planetas orbitando sin rumbo, arrastrados por fuerzas que no entendíamos. Pero el día que nuestros caminos chocaron, algo despertó. Algo que llevaba años durmiendo, escondido entre secretos, promesas rotas y el miedo a sentir.
Nunca imaginé que amar a alguien pudiera desatar tempestades.
Nunca imaginé que una tormenta pudiera salvarme.
Ahora lo sé:
Hay amores que iluminan.
Hay amores que destruyen.
Y hay amores -como el nuestro- que despiertan a la tormenta.

[historia basada en hechos reales]