Nunca me consideré la persona más afortunada del mundo, pero es innegable que algo de suerte tuve en mi vida.
Suerte de que mi familia esté compuesta por Alice Donahue Clark, renombrada pediatra que aporta el dinero justo a la casa para una buena calidad de vida, y que con sus cuidados compensa la falta de una figura paterna para mis hermanos y yo; mi abuelo Alexander Donahue, abogado y muy justiciero por naturaleza, que siempre me acompaña, y por último mi abuela Marilyn, cuyo amor hacia mí es incondicional.
Como dije, no me considero la más afortunada. Tuve mis roces en la vida, como cualquiera, pero les voy a contar el que me está sucediendo en este momento: el más doloroso.
Todo comenzó cuando mis notas bajaron y comencé a recibir tutorías, que primero eran realizadas por un profesor contratado para ello, pero al caer por las escaleras fue reemplazado por un almuno al que obligaron a dar clases como castigo por su mal comportamiento (y al ser brillante en las matemáticas): Ian Capel. Su nombre es lo único que sé.
Bueno, su nombre, y que sus ojos son los más oscuros que vi en mi vida, justo como él.
Y, joder, sí que es sexy.
LIBRO TRES DE LA SAGA ÁMAME.
Summer ha estado enamorada de Nikolai desde que tiene memoria, ella siempre ha estado consciente de que nunca pasaría algo entre ellos. Pero luego tras besarse y quizás un poco más, Nikolai comienza a ver de otra forma a Summer, por lo que ya no es solo la mejor amiga de su hermana.