Isagi tenía una misión simple: bajar a la Tierra, proteger a Rin.
Fácil, ¿no?
Bueno, excepto por un pequeño detalle:
Isagi es el ángel más despistado del cielo.
Desde su llegada, todo sale mal:
despierta a Rin a las 3 a.m. por "señales divinas", causa mini terremotos cuando estornuda, pierde sus plumas en los lugares más raros, y casi se delata cada vez que intenta actuar "como un humano normal".
Rin, mientras tanto, solo quiere vivir tranquilo, pero en vez de eso termina cuidando a un "extraño chico raro" que cae del cielo (literalmente), no sabe usar una tostadora y se sonroja cada vez que Rin lo mira demasiado.
Entre accidentes mágicos, choques de personalidad, excusas absurdas y una química que ni el cielo puede ignorar, ambos descubrirán que el verdadero peligro no son los demonios... sino enamorarse del ángel encargado de protegerte.
*La imagen no es mía, derechos asu autor