Jones siempre ha sido el rey del campus: atractivo, popular, un cuerpo trabajado a punta de entrenamientos y sin olvidar una novia porrista que encaja perfecto en el efecto película de su vida .Nada se sale del guion... hasta que Arlec, el hermano menor de Synti, llega para poner su mundo de fantasía de cabeza.
Arlec es un chico regular, a comparación de Jones el no es nadie pero su sola presencia provoca algo en Jones: un calor incómodo en el pecho, una tensión que le aprieta la garganta, un ardor que recorre todo su cuerpo con el mínimo roce, un tipo de atención que nunca había dirigido a alguien y menos a un chico. Jones lo odia. O eso se repite cada vez que sus miradas se encuentran y siente ese impulso eléctrico que recorre todo su cuerpo por esa profunda mirada que no sabe cómo apagar.
Es más fácil fingir indiferencia, incluso fastidio, que admitir que Arlec despierta en él pensamientos que no debería tener... especialmente cuando esos pensamientos se vuelven más intensos y calientes cada vez que están demasiado cerca, cuando el aire entre ellos se vuelve denso y Jones siente que está a un segundo de cruzar un límite que juraría no desear.
Entre provocaciones silenciosas, encuentros a prohibidos y un deseo que late bajo la superficie de sus cuerpos, Jones se enfrenta a la verdad más peligrosa de todas: que su rechazo a Arlec quizá no sea odio... sino miedo a lo que realmente quiere dentro de él.
ADVERTENCIA:
-18+[escenas sexuales explicitas]
-Proyecto en formato beta el cual si no es bien recibido podría eliminarse
No hay mucho que advertir así que disfruten este viaje de descubrimiento no solo emocional si no un nuevo mundo sexual a conocer.
[Reescribiendo]
Samantha Hell es una chica con una expectativa muy alta con respecto a su trabajo, tantos años de preparación y su nuevo objetivo no es nada a lo que ella imagino. Cambiar pañales no es lo que enceñan en la universidad, mucho menos a aguantar el humor de mierda de él jefe.
Samantha queria un trabajo en el mejor banco ruso, ser la niñera y jefa de cafetería no es para lo que ella pensó.
Ella no tenía planeado ser mamá...
Él no tenía planeado enamorarse de ella.