kenna sabia que ese lugar era hermoso, no podía evitar ir y observar a la otra manada de leones, pero eso se acabo cuando un depredador la encontró y de no haber sido por su hermano quizá no hubiera salido de esta, juro nunca volver, pero unas gatas en celo no le dejaron mas opción al adentrarse al territorio prohibido y tratar de ver a su alfa, tuvo que protegerlas de que no les pasara nada cuando se encontraron a un león enorme. desconcertada observo como este se ponía mimoso con ella y desde ese momento supo que le daría problemas.
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