el pecado que nos separo

Sinopsis (+18)

Hace veinte años, Salvador y Carolina se amaron con la inocencia feroz de la juventud, convencidos de que el amor bastaba para desafiar cualquier destino. No contaban con María Luisa, una madre devota y ambiciosa que decidió que su hijo no debía amar a una mujer... sino servir a Dios.

Con una amenaza cruel, María Luisa obligó a Carolina a convertirse en la villana de la historia, a romper el corazón de Salvador y desaparecer de su vida, cargando sola con la culpa y el silencio.

Dos décadas después, Carolina Guillén es una mujer elegante, casada con Manuel Navarro, un hombre poderoso y distante, madre de Romina, de dieciocho años, y madrastra de Carlos, un joven de veinticuatro años que despierta tensiones peligrosas dentro del hogar. Su matrimonio no es refugio, sino anestesia: una forma de no sentir, de no recordar.

El pasado regresa cuando Salvador, ahora sacerdote, cruza nuevamente su camino al llegar a la Casa Guillén para entregar un cheque de beneficencia... y se encuentra con ella. La mujer que, según él, lo traicionó sin piedad.

El reclamo es inevitable. La herida sigue abierta. El amor nunca murió.

Pero cuando Salvador descubra que fue su propia madre quien los manipuló y los separó, todo aquello en lo que cree -su vocación, su fe, su sacrificio- comenzará a resquebrajarse.

¿Puede el amor sobrevivir a veinte años de mentiras, culpa y deseo reprimido?
¿Es posible amar cuando hacerlo significa pecar... otra vez?

Una historia intensa de pasión contenida, traiciones familiares y deseos prohibidos, donde el amor no pide permiso y el pasado siempre cobra su deuda.