Prologo
En un día como hoy lluvioso, con relámpagos me doy cuenta que necesito dos razones para volver a sonreír al igual a papa,se que al dejar que mi compañera de estudios dentre en mi mundo y los deje alrrevez perdi mi ser,ella y su madre an dando vida a mi casa,y lo mejor es que an hecho reir mucho a papa,tengo miedo que el se olvide de mi y solo tenga ojos para su nueva vida.
Prim es mi compañera de filosofía la veía aveces atraz de todos leyendo historias y siendo burlas de msi amigos,siempre me pregunte como es que una persona aguanta tanto abuso,es un completo nerd asta lleva lentes redondos que acen ver sus ojos como un fenómeno,es rubia claro,su madre es castaña de ojos grises que logro enamorar a mi padre.
Desde que mama nos habandono mi padre solo a tenido tiempo para el trabajo y a mi,pero también le queda tiempo para conocer mujeres locas y psicópatas que secuestraran a prim y a mi en un viaje de curso.
Pero como dice katniss luego de la tormenta viene la paz,ella si es mi madre y no Delly la mujer que quiso venderme a un prostíbulo,aquella a la que di asta mi vida por salvar la suya,aquella que iso que discuta con mi padre y creo qe lo odiaba.
Solo tengo que abrir mi corazón para dejar que dos razones importantes dentren en el.
gracias al secuestro que mi verdadera madre me dio descubri mi SINDROME DE LYNCH los dias eran duros las quimoterapias solo me dejaban acabada,y lo peor que no era la unica que lo sufria si no mi familia,papa pobre de el siempre fui su dolor cuando mama se marcho y ahora cuando me toque ir....
solo se que cuando deje que ellas iluminen mi vida todo mejoro.
me di tiempo a vivir su vida en su mundo y enamorarme de un macho que me decia diva engreida,descubri que no eramos de mundos muy distintos solo era el dinero quien nos separaba.
¿Te has preguntado cuál es tu lenguaje del amor?
Celine Astor sí, y lleva toda su vida demostrando su amor a través de cartas.
Así que cuando su mejor amigo se molesta con ella en plena víspera de año nuevo, ella decide llenar su buzón de cartas, dispuesta a conseguir su perdón antes del inicio de año.
Con cada día que pasa, Celine está tan preocupada por las festividades y por llamar la atención de su objetivo que no se da cuenta de un pequeño detalle: su amigo nunca ha recibido sus cartas.
Entonces, ¿Quién es la persona misteriosa que la está llenando de regalos haciéndose pasar por él?
El reloj está corriendo y, con ello, Celine está próxima a descubrir quien es el inesperado destinatario que ha capturado sus letras, apropiándose de algo que no es suyo.
¿Estará preparada para enterarse de que el hombre misterioso que envía chocolate caliente y notas en adhesivos está más cerca de lo que cree?
Treinta y un cartas enviadas.
Treinta y un respuestas enredadas en largas horas de oficina.
Y cuando den las doce, todo habrá acabado.
¿O estará a punto de comenzar realmente?
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