Unos meses atrás, Clayre era una chica con los problemas típicos de su edad y disfrutando su adolescencia lo mejor que pudo, pero un suceso cambio toda la vida de la chica:
En un fin de semana, tras haber quedado con sus amigas, Clayre regreso a su casa como de costumbre, pero ese día, algo no iba bien. Primero noto como si la siguieran todo el camino hasta su casa. Luego empezó su pesadilla: Alguien entro en su casa... O mejor dicho, Algo, y tras intentar huir, la chica resulto herida.
Por suerte para ella, no era una herida mortal, pero desde ese día, comenzaron a ocurrir cambios en su mente y en su cuerpo.
Tras casi matar a una de sus hermanas en una disputa, Clayre huyó de su casa, rumbo hacia ningún lado. Por mala suerte, nadie esta a salvo de su destino.
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.