Hace tiempo que te conozco, aunque a decir verdad no es así, no sé cuáles son tus gustos a profundidad o las cosas que te molestan. Pero, ¿sabes qué? me gustaría hacerlo.
Tampoco puedo decir que somos amigos, aunque he de aceptar que mi concepto de “amigo” es muy elevado, y por supuesto que también me encantaría serlo, sería agradable confiarnos secretos y pedirnos consejos.
Lo cierto es que no nos conocemos ni somos amigos pero tampoco es que seamos unos completos desconocidos. Y sonara extraño pero lo que sea que seamos me gusta, me gusta el que pueda hablar contigo como si fuera la primera vez que lo hiciéramos, me gusta que hagas esos comentarios sarcásticos sobre nosotros, me gusta ver tu cara de adormilado algunas mañanas, me gusta cuando dices que vas a golpear a alguien si me rompió el corazón, me gusta ver tus gestos cuando estás jugando FIFA, me gusta que me abraces como cuando el hermano mayor protege a su hermana pequeña, me gusta el hecho de que no te de pena cantar una canción frente a todos, me gusta cuando te pierdes en tu mundo pensando en cualquier cosa, me gusta lo iluso que puedes ser algunas veces, me gusta el olor de tu perfume en tu cuello…
Ella odia la atención
Él adora la fama que tiene como jugador
Ella ama leer
Él ama el fútbol
¿Conseguirán ser más que amigos aunque ella sea vasca y él catalán? ¿Aunque ella odie el fútbol y él leer? ¿Aunque él la vea como la fan del Athletic y ella como el defensa del Barça?