Todo lo que he aprendido hoy en la clase sobre Shakespeare es que a veces tienes que enamorarte de la persona equivocada para encontrar a la correcta. Una lección más útil hubiera sido que a veces la persona adecuada no te corresponde. O que a veces la persona adecuada es gay. O que a veces tú mismo no eres la persona adecuada. O a veces comprobar estos puntos por ti mismo te puede crear y envolver en una personalidad distinta, menos vulnerable. Darte cuenta de que nadie va a asumir el papel de Patrick Veron para organizar a la banda del colegio para ofrecerte un espectáculo musical, o a Judd Nelson agitando su puño en el aire porque sabe que te conquistó. Gracias por nada, Shakespeare. [ Todos los créditos de la portada a ©harrytakeacat ♡ ]