Dicen que recordar es vivir, de echo era una buena opción que solía tener cuando alguien de mi pasado aparecía, después de todo ayudaba a comprender cuando había cambiado, como las cosas habían mejorado, hasta hace solo un año que las cosas empezaron a complicarse y entonces la última opción que quería era devolver la cinta, el tiempo y pensar en lo que había sido, está historia no es otra que aquella que clama por ser escuchada, es una historia que sucedió y se convirtió en lo importante, en lo que partiría mi vida en un comienzo y en un final, en dos partes, todo cuando pensaba que nada más podía pasar.