-Pero yo te amo. -¿En serio? Eso tiene mucha gracia, ¿sabes por qué? ¡Pues porque antes no decías eso! Antes yo no era para ti más que un estorbo; una chica pesada que no hacia más que estupideces. -Pero has cambiado...y sabes perfectamente como eras antes, necesitabas cambiar, y al hacerlo no te has arrepentido. Te ha gustado. A mi también... Ahora eres en realidad tú. Y yo me he enamorado de ti.