Ashley es una chica de 16 años, es lo más normal posible o eso se cree ella, con su pelo largo, ondulado y de un marrón tirando para rubio, y sus ojos azules, que a ella no le gustan para nada, piensa que son demasiado normales pero se dará cuenta de que realmente son muy diferentes a los demás, ya que un día cambian de color y se vuelven negros. Ashley se muda a un pueblo con muy pocos habitantes y lejos de la ciudad a principios de verano, junto con su madre, ya que su padre y ex-marido de su madre le empezó a acosar desde hace un año y medio. Después de todo acaba haciendo una amiga que se acaba convirtiendo en su mejor amiga. Pero todo cambia cuando una nueva familia se muda al pueblo y descubren lo que realmente es Ashley, y es hay cuando esos ojos azules cambian...y se convierten en negros... cuando el esta cerca pero... y si a el también le pasa lo mismo, ¿sera casualidad o sera el destino?.
-Me encanta el negro de tus ojos.
-Em...gra...espera, no son negros, son azules o por lo menos lo eran hoy a la mañana.
-No, son negros.
-Creo que sabre yo mejor de que color son mis ojos, ¿no crees?
-Sarcástica, preciosa y con una pizca de humor... me gusta. Me voy a divertir mucho contigo.-me dijo y vi como me daba una sonrisa malvada pero no me daba miedo en absoluto.
-¿Qué? ¿Eres imbecil o te lo haces? !O NO ESPERA¡ ¿TE CAÍSTE DE PEQUEÑO DE LA CUNA NO?
-Lo que has oido nena y no, no me caí de la cuna.
-No me llames a...-y se fue, simplemente se fue, y me dejo con la palabra en la boca, sera imbecil...
¿Quién es el? ¿Qué le pasara a Ashley? o mejor ¿Qué es Ashley? Si quieres saberlo sigue leyendo.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS
SI HAY FALTAS DE ORTOGRAFÍA LO SIENTO
Fleur: Mi desesperada decisión ✔️[Darks #0] ¡Ya en librerías!
49 parts Complete
49 parts
Complete
[COMPLETADA] Una noche fue suficiente para cambiarlo todo, para destruirlo todo. Él acabó con mi familia, con todo lo que amo y por alguna razón me dejó con vida, ¿Por qué? Es tan doloroso vivir después de esa noche, tal vez él quería que viviera y sufriera, ese me parece un destino aun más cruel que la muerte.
Sobrevivir se ha vuelto mi pan de cada día, y no pasa ni un segundo en el que no intente recordar esa noche, recordar su rostro, identificarlo para que se haga justicia. Soy la única testigo, la única persona que ha sobrevivido de los ataques de ese asesino frío y no puedo ayudar porque no recuerdo nada. La impotencia de no poder darle la justicia que se merece mi familia y todas las otras familias que han sido víctimas me carcome por dentro y me duele cada día.
Pero no me voy a dar por vencida, lo voy a recordar, lo voy atrapar así pierda mi vida en el intento.