LA DEUDA

Siempre estaremos arrastrando una obligación con alguien, sea esta económica, social o familiar. La deuda hace parte de nuestra vida, nos rompe el alma, daña nuestra capacidad de pensar, llena de angustia el instante preciso en que acabamos de ser felices. La deuda está ligada a nuestro ADN, es tóxica, nos la imponemos como una enfermedad necesaria de la que somos incapaces de separarnos. Con deuda compramos una casa, un carro; con deuda educamos a nuestros hijos y nos vamos de viaje. Con deuda buscamos hacer realidad los sueños que terminarán volviéndose pesadilla.
En este cuento que se desarrolla en Villa de Leyva, un viejo guitarrista inglés, un poeta dedicado a la sastrería y un testigo adorador de la ebriedad, nos muestran el difícil camino que afrontan los hombres cuando deciden independizarse de un remedio que suele ser peor que la enfermedad que quieren curar.