No siempre los sueños terminan en final feliz. A veces, los mejores inicios terminan en terribles pesadillas pero, cuando uno despierta el sueño, bueno o malo, termina. Pero cuando la pesadilla se encarna en el que creíste era el amor de tu vida puede que no puedas despertar. Puedes correr, pero no puedes huir, pues los sentimientos nunca quedarán atrás, ellos siempre están adheridos a ti. Y nadie puede huir del pasado, menos los que años atrás su destino ataron.All Rights Reserved