Introducción
¿Cuántas veces no hemos conocido o hemos escuchado a personas muy inteligentes pero que en su trabajo, en su familia o en la sociedad actúan de manera estúpida? Es muy probable que muchas.
En páginas centrales de los periódicos y en los noticiarios televisivos escuchamos constantemente historias muy tristes. Por ejemplo, hombres muy respetados, muy educados y exitosos que arriesgan todo por una aventura sexual. No sólo sacrifican su integridad personal sino, además, si reputación, carrera, ingresos económicos, matrimonio y familia. No han perdido su inteligencia, sino que no la supieron utilizar "en forma inteligente".
¿Cuántos campeones mundiales de boxeo han quedado en la miseria? Muchos de ellos tocaron la cima y ganaron millones de dólares gracias a su carrera pugilística; sin embargo, al no haber desarrollado su inteligencia frontal y las capacidades de jerarquización y autocontrol, tuvieron una vida de exceso y, hasta después de varios años de su retiro, "tocaron fondo".
Una gran cantidad de celebridades del mundo científico, artístico, político, y deportivo poseen una enorme capacidad intelectual y, sin embargo, han destruido su carrera por carecer del control de sus impulsos: ingieren alcohol, consumen drogas, tienen comportamientos que ponen en riesgo su integridad. baste recordar la vida de Paris Hilton, Michael Jackson o de Diego Armando Maradona. Un ejemplo más lo vemos en el escándalo en el que se vio envuelto Tiger Woods, el golfista más grande de todos los tiempos, quien reconoció públicamente que, durante cuatro años, tuvo una vida sexual extramarital con varias mujeres. este engaño no sólo arruinó su vida familiar y matrimonial sino, además, su vida personal y profesional. Y todo por carecer de una inteligencia frontal. A pesar de ser un deportista muy brillante cometió un grave error que provocó el abandono de sus patrocinadores y perdió mas de 200 millones de dolares como consecuencia de este escáda