¿Qué pasaría si en un día común escucharas un grito proveniente de tu casa? Y aun peor, a un grito de tu hermana y no un grito como cualquier otro, un grito de que la están acuchillando y matando, así es la vida de Brendon , un chico común que de pronto descubre algo inimaginable, ya que su hermana es asesinada en su propia casa ,después, su ciudad es encerrada dentro de una pared de metal, aislada del mundo exterior y además, la gente empieza a desaparecer al llegar al lago, así que Brendon decide ir a investigar, lo peor, es que no encuentra el cuerpo de su hermana, ni en su casa, ni en ninguna otra parte.
El pueblo de Wilson es tranquilo, regido por sus costumbres y creencias religiosas muy estrictas, donde Leigh ha crecido, siguiendo cada regla y pauta como se le ha indicado. Un pueblo donde no se recibe con mucha gracia a los recién llegados así que cuando Los Steins se mudan a su lado, Leigh no puede evitar sentir curiosidad.
Los Steins son adinerados, misteriosos y muy elegantes. Lucen como el retrato perfecto de una familia, pero ¿Lo son? ¿Qué se esconde detrás de tanta perfección? Y cuando la muerte comienza a merodear el pueblo, todos no pueden evitar preguntarse si tiene algo que ver con los nuevos miembros de la comunidad.
Leigh es la única que puede indagar para descubrir la verdad, ella es la única que puede acercarse al hijo mayor de la familia, el infame, arrogante, y frío Heist.