El olvido me ha dicho que no es nuestro momento, que me espere y que deje de buscarle, porque en lo que refiere a ti, nunca voy a encontrarle.
Parece que no quiere que te olvide, menudo hijo de puta, yo aquí deseando deshacerme de ti, aunque me duela, y él se burla de lo nuestro queriéndome hacer sufrir y hacerme recordar todas y cada una de las cosas que llegamos a vivir.
Y no quiero, joder.
No quiero que cada cosa que hago pueda recordarme a ti.
No quiero que de la nada aparezca el olor de tu perfume o que alguien se ría casi de la misma forma que tú lo hacías.