L.O.V.E. predestinado

La puerta tenía seguro.
¿Acaso había sido tan descuidada que no había notado que tenía seguro?
Traté un par de veces girando la manilla al tiempo que empujaba la puerta con todo el peso del cuerpo recargado en el hombro izquierdo, pero que mis pantuflas se deslizaran a causa del suelo de madera no ayudaba en lo absoluto. Retrocedí unos pasos para tratar de derribarla aunque sabía que eso sería inútil.
A unos segundos de impactar contra la puerta está se abrió de golpe haciéndome caer dentro de mi habitación, pero no sobre el suelo,sobre lo que había caído se quejaba por el golpe y su piel emanaba calor. Aparté el cabello húmedo de mi rostro y pude notar que estaba sobre el pecho descubierto de un hombre, mis ojos estaban desorbitados como los de un buho y mi estómago se contrajo ante la idea de que un pervertido hubiera entrado a la casa. Levanté la mirada recorriendo su pecho y su cuello hasta llegar a su rostro, cabello oscuro y despeinado, grandes ojos...era Ren. Era...¿Mi Idol?