ÉL no era como los demás, no buscaba rollos, pero tampoco el amor. Según él, no tenía lo necesario para satisfacer a una chica. ELLA no creía en el amor, creía que era todo fruto del aburrimiento y en gran parte de las hormonas, temía que si estaba con alguien, acabaría dolida. Para ELLOS, la palabra "amor" no era más que eso, otra palabra más que encontrar en el diccionario. Una palabra SOBRE VALORADA. *** -Puede que sea un friqui - le digo a mi hermana indignado delante de todo el instituto - pero tengo sentimientos, me da igual tu popularidad y la mía, me da igual como me vean, lo único que me importa es ella. -Pero si ni siquiera es de aquí, ella es de Noruega, tímida, no habla de nada con nadie, se dedica a hacerle trabajitos a los profesores para conseguir los sobresalientes que saca. -No te atrevas a hablar así de ella - le pego una bofetada - ella estudia para sacar a su futuro adelante, quiere depender de ella misma aunque sus padres sean ricos, y ¿sabes una cosa? Me he enamorado de su timidez. -Tu antes no eras así, me repugnas Edgar Miles - dice marchándose y haciéndose hueco entre la multitud. Al final del pasillo veo como Michelle escupe a su lado derecho, y aparece Emma pálida. -Emma... Yo... Lo siento - se va corriendo enfadada.