El verano de mis trece fue cuando comenzó todo; y sí, con todo me refiero a todas las "situaciones amorosas" que viví, aunque para ser sincera no fue nada serio. Ese verano también comenzó mi afanación por el surf, todo gracias al nada profundo de Thiago. Hasta que finalmente en el verano de mis quince creí conocer a alguien que sí valía la pena, alguien que tal vez se convirtió en mi primer amor. Hasta que ahora, con veintiún años estoy en la bañera de mi habitación de hotel recordando todas las idioteces que hice en mi divertida y penosa adolescencia. Soy Naomi Whitin y pienso contar mi historia, desde ese verano hasta la actualidad.