El, no parece un chico malo. El es el chico malo que se disfraza como el chico bueno. Ella, es la chica común y corriente. Que siempre está en el lugar equivocado, en el momento equivocado. -te lo pondré de una forma sencilla-comenzó-los peces diablo Negro, viven en la oscuridad eterna. Son peces diferentes a los demás. Son unas horrendas bestias pero, ellos tienen un atractivo, tienen una hermosa y radiante luz, para atraer a los pececillos ingenuos hacia ellos, y cuando están completamente cegados por esa falsa belleza, los devoran. -¿Te estás comparando con un pez?-pregunté. El solo rió. No querida, yo no soy un pez- se acerco a mi oído y susurró-yo tomare cada gota de espíritu, cada gota de sangre que tengas, te hare sufrir hasta que ruegues por tu vida y cuando lo hagas, te mataré-un escalofrío recorrió mi espalda. -Sabiendo esto, dime ¿aún confías en mí?